Hay que decirlo porque es ya cotidiano: vivimos una polarización en todos los ámbitos y probablemente el clima político promovido por este gobierno, a partir de las mañaneras, hace que ahora las cosas sean blanco y negro, no hay matices y si los hay se olvidan, porque finalmente lo que se busca es que a partir de estas opiniones no matizadas, se pueda acusar de posturas radicales a unos u a otros.
Y si hablo de esto es porque es evidente que este gobierno y el presidente Andrés Manuel López Obrador no son de mi agrado. Y me parece que los ciudadanos fuimos engañados con un cambio que ni ocurrió, ni transformó y que sólo profundizó los graves problemas que tiene este país. Por ejemplo, AMLO ha gastado carretadas de dinero en sus faraónicas obras y el resultado de las mismas no existe. Habla de una refinería que dice que ya se construyó pero que ya va en los 20 mil millones de dólares y además, según estimaciones de los expertos, si refina algo, será después del 2024. Para colmo, otros expertos han indicado que no es suficiente la refinería, sino que no hay los caminos ni la infraestructura para llevar los combustibles procesados fuera de Dos Bocas a las diferentes partes del país.
Y ni hablar del AIFA, el supuesto aeropuerto internacional que no lo es, porque no cumple con las regulaciones de los organismos internacionales que avalan esta posibilidad y que para colmo, de nuevo, antes de construirlo, habrían que haber construido las vías y caminos para llegar al mismo. Hoy es, paras todo fin práctico, un elefante blanco y una especie de "pueblo fantasma".
Pero si olvidamos un poco las desgracias de este país y nos concentramos en cuestiones más locales, Facebook es un sitio donde las opiniones se radicalizan de inmediato, y se polarizan porque los internautas -en sus opiniones- siempre creen tener la verdad y ni siquiera se ponen a pensar en los puntos de vista de las discusiones que emprenden en la red social. Por ejemplo, le escribo al presidente de la asociación de ajedrez de la UNAM, porque me quiero afiliar ya que he retomado un poco mi actividad ajedrecística, que por muchas razones limité por unos 13 años. Esta fue la conversación (M - Yo, Manuel; U - Presidente de la Asociación de la UNAM):
M- hola, es posible afiliarse a la UNAM? Te pregunto porque estoy retomando uun poco mi actividad de torneos y la fenamac cobra ingentes cantidades por la afiliación y para colmo, es anual. Me puedes dar info? saludos
U-Hace mucho que la UNAM no puede afiliar debido a las restricciones que la FENAMAC impuso a nuestra Asociación.
M - y por qué no los deja?
U - Cómo defensor de la Federación, deberías saber esas cosas.
Y me sorprendí... ¿Por qué me dice "defensor de la Federación"? Porque miren, ni trabajo para la FENAMAC y no tengo nexo alguno en favor o en contra. Es cierto que en ocasiones, en algunas discusiones por Facebook, he defendido a la FENAMAC porque he creído que lo que dicen en su contra es falso, pero en otras ocasiones he criticado duramente a la FENAMAC, tanto en administraciones pasadas como en ésta. He aquí algunos artículos de mi blog:
https://la-morsa.blogspot.com/2011/04/omisiones-y-errores-del-campeonato.html
https://la-morsa.blogspot.com/2014/02/la-inutil-federacion-mexicana-de-ajedrez.html
https://la-morsa.blogspot.com/2016/03/el-extrano-mundo-del-ajedrez-mexicano.html
https://la-morsa.blogspot.com/2022/08/como-calificar-al-equipo-olimpico.html
https://la-morsa.blogspot.com/2011/01/la-inutilidad-del-sired.html
https://la-morsa.blogspot.com/2016/04/el-campeonato-nacional-abierto-de.html
Pero como parte de la naturaleza de la polarización en las opiniones: "mata un perro y te dirán mata-perros". Es decir, los que siguen las discusiones en las redes sociales no saben de antecedentes, ni de cuál ha sido mi postura para con la FENAMAC, la cual -como puede verse- no ha sido favorable a la institución.
Pero hay más, le pregunté al presidente de la asociación de la UNAM que suponiendo que defendiera a la FENAMAC, si eso quiere decir que no me podría afiliar a la UNAM por ello. Me contestó así:
U - Si tuviéramos la oportunidad de afiliar a la Comunidad, con gusto lo haríamos, independientemente de cualquier postura que tengan.
Muy bien, entonces ¿a cuenta de qué sale con ese comentario que soy defensor de la FENAMAC? ¿Qué tiene que ver? Se lo pregunté un par de veces en este intercambio y finalmente se disculpó por dicho comentario.
Vamos, no pasa nada, pero me queda claro que de pronto la imagen que damos ante los demás, debido a la naturaleza de las redes sociales, se pierden los matices: somos buenos o malos, defendemos o atacamos a AMLO y nadie va más allá. Por ejemplo, en este último caso siempre he dicho que no ataco a AMLO, ataco al presidente, llámese como se llame, por la cantidad de dislates, de mostrarse como un inepto, de ser un mentiroso y de creerse único e irrepetible, en donde sólo él tiene la verdad. De nuevo, él es un ejemplo perfecto de la polarización en la que estamos inmerso.
¿Cómo cambiar eso? Hay ue informarse, contrastar ideas y no hacerse de un perfil sólo por una discusión o un artículo publicado.
2 comments:
Siento que la UNAM debería seguir teniendo la opción de afiliar jugadores. Es una asociación llena de fuertes jugadores a través del tiempo, ahora son claro ejemplo: Carlos Sandoval, Manuel López, Froylán Luna... Es claro que la gente necesita ver los claroscuros. Porque con tanto extremismo dejan de ver los propios errores y las cualidades de los demás. Habrá que matizar las concepciones que tenemos de los demás. Atte. Lenin González Arroyo
Como siempre una publicación clara y apoyada en datos y hechos, es una pena que no hayan podido afiliarlo a la UNAM, ojalá las cosas cambien en el siguiente sexenio aunque la verdad lo dudo...
La polarización que promueve el presidente sirve para mantenernos ocupados en discusiones bizantinas y no en lo que realmente debería preocuparnos, "divide y vencerás" dice el refrán.
Mientras existan personas valientes como usted Maestro Manuel tendremos esperanza, le envío un cordial saludo.
Atte. Jorge Leobardo LÓPEZ.
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