No sé a
ustedes, pero se me ocurre que en estas últimas semanas el Presidente de México
ha estado más que errático. Su último dislate fue cuando mencionó públicamente
el teléfono de la reportera del New York Times (creo), y ante la queja de una
periodista, López Obrador, que cree que su palabra e ideas son intocables,
insistió que no había cometido ninguna indiscreción, ningún error. He aquí el
lamentable fragmento de la mañanera:
El episodio
ha tenido consecuencias. Por ejemplo, pate del pueblo bueno y sabio ha filtrado
entonces el teléfono de la Sra. Sheinbaum, de Xóchitl Gálvez y del hijo mayor
de López Obrador. Será interesante qué va a decir el presidente el lunes de la
mañanera pues el consejo que le dio a la periodista estadounidense es que
"cambiara su número telefónico". Y quiero creer que si alguien filtra
su dirección de donde vive, el peje dirá que "se cambie de
domicilio"... Es de una lógica elemental pero absurda.
La cuestión
es que en estos días los ataques de López Obrador a los periodistas que cubren
la fuente han subido de tono y da la impresión que el presidente está fuera de
control. Para colmo, da la impresión (o al menos es mi percepción), que su
enojo está fuera de lugar, que está más preocupado por lo que dicen de él que
por gobernar al país. Ya ni hablemos de los problemas de inseguridad que asolan
al territorio nacional, ni del sistema de salud como el de Dinamarca que es en
términos reales inexistente (y quien no me crea, vaya a cualquier hospital del
IMSS para que vean las limitaciones de dichos nosocomios en donde falta incluso
agua y papel de baño. Y nadie me lo contó. Lo viví en diciembre del año
pasado). Ni qué decir de la refinería de Dos Bocas, el AIFA o el Tren Maya, que
son elefantes blancos que simplemente significan tirar los recursos del país en
obras faraónicas poco rentables. En fin, la cosa es que las mañaneras son para
victimizarse el presidente. Él es tan bueno que no entiende por qué hay gente
que está en su contra. Y así, ha arremetido contra los científicos (que quería
encarcelar), o los periodistas y periódicos que están en su contra porque de
acuerdo a su narrativa, sigue creyendo que es un poderosos grrupo de
conservadores que "están muy enojados" porque les han quitado sus
prebendas y beneficios. Y esa es la historia que ha contado por más de 5 años
el presidente. Y se ha desgastado su discurso de buenos (ellos) contra malos
(Claudio X. González y aliados).
En resumen,
López Obrador ha perdido el piso y apela a una serie de argumentos que incluso
son preocupantes porque sus mensajes incluso se ven confusos. Veamos su más
reciente tuit:
El texto
dice: @lopezobrador_
Por
censura, YouTube nos bajó el video de la conferencia de prensa del jueves 22 de
febrero, pues, según ellos, “infringe las normas de la comunidad“. Es una
actitud prepotente y autoritaria. Están en plena decadencia. La estatua de la
libertad se ha convertido en un símbolo vacío.
Afortunadamente
nosotros iniciamos la lucha por la transformación del país repartiendo volantes
y no sólo sin el apoyo, sino en contra de los medios de manipulación de la
oligarquía. Ni la mafia del poder ni el hampa del periodismo podrán
silenciarnos.
Como diría
el Quijote: “La libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los
hombres dieron los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que
encierra la tierra ni el mar encubre; por la libertad, así como por la honra,
se puede y debe aventurar la vida”.
No sé quién
le escribe los tuits al presidente, pero claramente no es él aunque sí cumple
lo que el gobernante quiere decirnos. Y vamos a tratar de entender de qué censura
habla. El presidente de este país no parece saber que Internet es una red de
comunicación global y que las empresas que prestan algún servicio no necesariamente
se rigen por ninguna norma o ley mexicana. YouTube le bajó un video a López
Obrador por incumplir las normas de la comunidad de dicha red social de videos.
Ergo, son sus reglas y es su casa. Y pongo un ejemplo trivial: cada persona en
este país puede decidir a quién invita a su casa. Si por ejemplo, viene alguien
sucio, grosero e incluso violento, pues
más de una persona no le dejará entrar a su domicilio. Pues es lo mismo con
YouTube. Ellos ponen una infraestructura enorme para que la gente haga
contenidos en video y ellos deciden qué se queda y qué no puede estar en
YouTube. Vamos, en esta red de videos no se tolera la pornografía e incluso
aunque sea en lenguaje hablado por alguien. Es la prerrogativa de YouTube. ¿No
le gusta al presidente? Pues haga su propia red de videos para que no sufra por
la censura que le impusieron.
Yo dudo que
frases como "La estatua de la libertad se ha convertido en un símbolo
vacío" tenga realmente sentido. Vamos, da la impresión que López Obrador
requiere que le ayuden a definir algunos conceptos como el de censura y libertad.
Y si digo esto es porque según AMLO, la libertad está sobre cualquier ley... Y
lo sabemos bien: se equivoca.
Así las
cosas. Mi pronóstico es que AMLO, hasta el último día de su gobierno, dirá un
sinfín de dislates y terminará mal el asunto. Él quizás creerá que fue el mejor
presidente (después de Juárez), pero la realidad es que está lejos de dicha
etiqueta.
En estos días nació una polémica porque Twitter decidió bloquear la cuenta de Donald Trump. Anterior a esto las cadenas de televisión estadounidenses decidieron cortarle la señal al mismísimo presidente de su país porque su discurso era claramente de odio y violencia. A partir de esto se inició una enorme discusión en medios e incluso en la mañanera de López Obrador, sobre la censura de Twitter al presidente norteamericano. López Obrador lamentaba esta censura y apelaba entonces a la idea de que México hiciese su propio sistema de redes sociales, como Facebook, para evitar así el sagrado derecho a la libre expresión. Idea absurda como son las cosas en este mundo virtual.
Lo primero que hay que entender es que Twitter no es un derecho de las personas. No es un derecho humano. No. Twitter es una empresa que da un servicio que es “gratuito”, es decir, no le cobra a sus usuarios. En su modelo de negocios la mercancía que venden es precisamente los usuarios, el volumen de millones de usuarios, que pueden aprovechar las empresas para anunciarse, de acuerdo al nicho que se trate. Pero el servicio que otorga Twitter a sus usuarios, y las condiones de uso –aceptadas por aquellos que se inscriben al sistema– es simplemente el de escribir mensajes de 280 caracteres. Si ese es el servicio que presta Twitter, ¿por qué bloquea cuentas?
Lo que ocurre es que Donald Trump, violó el acuerdo sobre las cosas que se pueden publicar. Si incita a la violencia, al odio, al racismo, o cualquier otra conducta que la red social considera impropia, se toma la red Twitter el derecho de bloquear al infractor. ¿Es eso censura? La realidad es que no lo es: Donald Trump, mi vecino, el hombre de la calle, puede decir lo que se le antoje, simplemente no lo puede decir vía Twitter si está bloqueado. Vamos, no hay ningún tipo de censura. Twitter no es un derecho universal humano. No tiene ninguna obligación de abrir esa red social a quien incumple con las reglas que se pusieron a priori.
Supongamos que no es Donald Trump, sino un grupo terrorista quien escribe mensajes de odio, o se pone de acuerdo esta red social para planear ataques terroristas. Evidentemente Twitter podría bloquear a estos personajes y nadie diría que se está ejerciendo la censura ¿verdad?
Otro ejemplo: YouTube tiene sus propias reglas de operación y no acepta pornografía en los contenidos que los usuarios pueden subir. ¿Es eso censura? No. Cada quien puede subir los contenidos que sean a los canales adecuados. Y esto es lo mismo que pasa cuando uno va al cine a ver una película clasificación C. Los niños no pueden entrar… ¿Es eso censura? Tampoco. Un ejemplo más: digamos que le pido a un periódico que me dé una columna para escribir mis ideas, las que sean. Si el periódico no accede a esto, ¿me está censurando? Por supuesto que no.
El ignorante presidente que tenemos está muy ocupado viendo las redes Twitter y Facebook, en lugar de estar trabajando en los problemas nacionales. No se ha enterado cuáles son los derechos fundamentales de los seres humanos. No se ha dado cuenta que Twitter ni siquiera pinta en ellos. Por eso reclama en sus mañaneras estas tonterías y la realidad es que cada mañana se observa la ignorancia, la estupidez y la falta de seriedad de un presidente que soñaba ser la cabeza de una nación como México, pero que le ha quedado grande. Y así, en lugar de ser el gran estadista que él imagina que es, es simplemente un señor que no debería estar en ese puesto. Es un presidente en todos sentidos lamentable, amén de ser un mentiroso cotidiano.
Hay que decir, sin embargo, que las redes sociales han cobrado mucha importancia y Twitter y Facebook son líderes. Obviamente eso les da poder porque las personas en grandes cantidades, usan estos servicios. Y esa imporrtancia hace que cuando deciden bloquear a alguien, se tome como un acto de censura, lo cual ya aclaramos, no lo es. Pero mientras las personas accedan a estos servicios, los popularicen y los usen con asiduidad, es claro que su relación con el entorno social será muy importante.
El problema es que López Obrador no entiende nada, porque está verdaderamente senil, porque diario tiene que inventar cosas para tratar de convencer que vamos muy bien, aunque los hechos hablen exactamente de lo contrario. La pandemia es un ejemplo. Así su creencia de que Twitter está censurando a usuarios es simplemente no entender nada. Y ya francamente no me extraña.
Internet se convirtió en relativamente pocos años en un servicio tan fundamental como podría ser el teléfono o la televisión. Hoy cualquiera que tenga un teléfono inteligente usa cotidianamente la red de redes y entiende que este servicio es muy importante para muchísimas cosas de la vida cotidiana.
La virtud de la red es su libertad de acceder en principio a cualquier contenido, a poder ver una página web hecha en un servidor gratuito o bien en uno de paga a la misma velocidad. La posibilidad de acceder a cualquier información sin que alguien verifique por qué estamos entrando en un sitio particular es parte de lo que hacemos todos los días al entrar a Internet y lo consideramos como una obviedad.
Pero no lo es y ya alguien está proponiendo que los proveedores de Internet puedan decidir qué sitios te pueden bloquear o bien, a cuáles darles prioridad y mayor velocidad de bajada, cuáles hacerlos lentos para cargar e incluso, por qué no, cobrar por entrar a ciertos sitios. Y esto es precisamente lo que se llama "la neutralidad de la red", la cual una vez más se está poniendo en riesgo porque no falta el vivales que quiere hacer negocio para sacarle agua, si se puede, a las piedras.
Y entonces ya hay voces que se están levantando para impedir que esto ocurra. La gran virtud de la red de redes, de Internet, que de pronto se volvió importante y que los gobiernos ya no ven con tan buenos ojos, es que es incontrolable. La llegada de las redes sociales como Facebook y Twitter, que incide en muchas ocasiones en el ámbito local, no es del agrado de los actores políticos y de hecho, muchos están enojados, porque no hay límites a lo que la gente escribe en dichas redes sociales y hasta los lambiscones de estos personajes han salido proponiendo leyes para controlar Internet.
Por ello, esto de la neutralidad de la red permitiría discriminar por diversos motivos. Y ya estamos llenos de esquemas discriminatorios. Por ejemplo, el Banco Santander tiene en sus sucursales tres filas: la de clientes, la de clientes con tarjeta "premium" y aquellos que no son cuentahabientes, que probablemente van simplemente a cambiar un cheque, o a pedir cambio de algún billete, etcétera. Y entonces, para este banco -que da un pésimo servicio- el dinero de algunos vale más que de otros. Por ejemplo, llego, me formo en la fila de clientes, pero como no soy premium, entonces no tiene importancia en qué lugar de las fila esté, porque antes van a atender al que es premium, porque tiene más dinero que yo, y eso es absolutamente injusto y discriminatorio. Para colmo, se da a manejos discrecionales de los cajeros a quién llama cuando se desocupa la caja. De nuevo, un esquema que busca preferenciar a los cuentahabientes con mucho dinero en ese banco y despreciar a los que tienen menos dinero. ¿A quién se le habrá ocurrido semejante idea tan fuera de lugar?
Porque miren, discriminamos en muchísimas cosas, para bien o para mal. Hay quien le gusta mejor ir a Starbucks que a una cafetería en donde haya mesas y sillas y no sillones como si fuese un "set" de la serie televisa "Friends". Somos productos manipulables y hay quien le hace feliz que le pidan su nombre para ponerlo en el vaso de cartón donde le entregarán su bebida. Y podemos discriminar y probablemente está en nuestra genética, para elegir lugares o situaciones en donde nos sintamos cómodos. Pero discriminar porque otro tiene la piel más oscura, o porque es un obrero, o porque nos sentimos superiores, es ahí es donde esto ya no cabe.
Y regresando al problema de la neutralidad en la red, pues simplemente no va a pasar. Y no ocurrirá porque la red Internet es en conjunto mucho más fuerte que estas propuestas. Recuerdo en estos momentos la iniciativa de ley SOPA (Stop Online Piracy Act), que era una idea para de nuevo, que los gobiernos controlaran a Internet. Tampoco prosperó.
Asumo que cuando las cosas se vayan a poner peor, los sitios más importantes tomarán acciones. Cambiar la inercia de Internet es -en mi opinión- imposible. Y no es por no cambiar, sino porque así funcionan bien las cosas. Esta es otra iniciativa que terminará por desecharse, como las N iniciativas que se han presentado, particularmente la del gobernador de Hidalgo, que es una de las más absurdas y ridículas que se han presentado en nuestro país.
De acuerdo con el Siglo de Torreón, el PRI plantea la posibilidad de regular las redes sociales. He aquí lo que dicho diario dice: Debido a que el presidente electo de México, Enrique Peña Nieto, ha sido criticado a través de las redes sociales, el presidente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Pedro Joaquín Codwell lanzó la propuesta para la regularización de éstas ya que “hay mexicanos que las utilizan para denigrar en vez de fomentar valores éticos y culturales”.
Y continúa:
En el marco de la Cumbre de la Comunicación, el líder del partido tricolor mencionó que las redes sociales han ampliado las dinámicas de comunicación, sin embargo, aseguró que es necesario regularlas.
Codwell declaró: ‘No se puede renunciar a las nuevas tecnologías pero es necesario aprender a usarlas’.
Cabe mencionar que lo de las redes sociales salió al quite durante la exposición del priísta, sobre lo que se avecina con Peña Nieto en la presidencia de México, además de su concepto de educación como pilar y motor de cambio.
Finalmente, Pedro Joaquín Codwell dijo que se favorecerá a la educación, con el objetivo de que los mexicanos puedan potencializar sus calidades, así como tener un ingreso fiscal con honradez que termine con las prácticas oligo-políticas. Aseguró que pretenden impulsar una ‘revolución pacífica’ con nuevas definiciones de justicia y de paz.
Hasta aquí la nota.
A mí en lo particular no me extraña nada la actitud de este nefasto político. Las redes sociales, la red, es cada vez más veces blanco de ataque de muchísimos frentes que buscan regularla. No hay que ir muy lejos: ACTA, PIPA y todas esas dizque regulaciones para evitar la piratería tienen en el fondo una intención más clara: regular el comportamiento de la gente que ha hallado que en Internet no hay censura y que se puede decir de todo.
Desde luego que como en todos los casos, hay cosas reprobables en las redes sociales, pero también las hay muy valiosas y estas últimas sobrepasan por mucho a las malas. Finalmente tenemos un instrumento de comunicación a nivel mundial que no lo controla nadie, que no tiene compromisos con nadie y que, en el mejor de los casos, puede ser un contrapeso a los abusos.
Los medios de comunicación están en general en manos de unos pocos y las tendencias a favor de algunas políticas públicas y en contra de otras, es mero reflejo de las necesidades particulares que tienen esas empresas. Así, no son medios libres, sino que se supeditan muchas veces al control vía contratos de mucho dinero o simplemente el apoyar una postura porque a estos medios les conviene.
Ya Codwell salió a decir que él no dijo que se regularan las redes sociales. Sin embargo, es evidente que lo que busca es que se regulen. A los poderosos les encantaría que no hubiese voces en su contra, y menos ahora que han cometido un fraude espectacular al comprar una presidencia de la República. Estos malandrines del PRI buscan saquear el país. Acuérdense de esto cuando lleguen las devaluaciones, o las inflaciones desatadas, o estas calamidades que se habían estado controlando desde los dos últimos sexenios (y que conste, no le voy al PAN, antes de que salga alguien con esa tontería).
En los meses pasados hemos sabido de esfuerzos de legisladores de otros países para regir las actividades de Internet. ACTA fue una de esas propuestas, la cual fue atacada por los defensores de la Internet como si les fuese la vida en ello. Wikipedia, por ejemplo, como muchas otras páginas, puso la suya en negros, es decir, inaccesible en general como protesta a esta iniciativa por regular la red de redes.
Pero ¿por qué hay este afán de los gobiernos? ¿qué hay detrás de todo esto? Evidentemente hay muchos intereses tras la regulación de Internet. El problema es que como no se reguló desde un principio, ahora es prácticamente imposible siquiera el intentar controlarla. La cuestión es que la muy aplaudida libertad de expresión en el fondo no le hace gracia a los gobiernos. En un afán por mantener bajo control este elemento, que antes solamente le pertenecía a los medios impresos y electrónicos (al cual en alguna medida puedeen controlar), se les ocurren estas iniciativas que al final del día no son otra cosa que la censura en su forma más pura.
Desde luego que los gobiernos apelan a los derechos de autor para justificar sus iniciativas, aunque esto simplemente ya no sea aplicable. Por ejemplo, cuando nacieron los archivos de música mp3, nadie vio con malos ojos esta idea. Pero cuando esto se convirtió en un problema para la industria disquera, que mantenía unos márgenes de ganancia colosales, pues ya el asunto no les hizo gracia. Y entonces, en lugar de cambiar de modelo de negocios, decidieron que pelearían contra toda esta perversidad de los usuarios de Internet que comparten archivos en todas las modalidades posibles. Mala idea porque Apple, por ejemplo, se dio cuenta que el modelo tradicional de la industria de la música no podía mantenerse más y entonces decidió -vía iTunes- vender canciones separadas a 99 centavos de dólar. La idea fue tan interesante que el primer día Apple vendió un millón de canciones, aproximadamente. Eso demostró además, que la gente está dispuesta a pagar si se le da un precio justo. En el modelo tradicional había que comprar un disco compacto completo cuando quizás sólo nos interesaba una o dos canciones del mismo.
Evidentemente la tecnología sigue avanzando y el siguiente paso fue incorporar los libros a este esquema. Amazon ya vende, por ejemplo, más libros en formato electrónico que en papel, pero muchos internautas se han dado la tarea de digitalizar obras mayores y menores, usando un escáner y programas que pasan la información escaneada a archivos PDF. Esto de nuevo, pareciera ahora poner a la industria editorial en jaque, pues ¿de qué van a vivir? Lo mismo se han estado preguntando los de las casas disqueras y finalmente, siempre habrá quien compre sus obras. La diferencia es que ahora no podrán ganar lo que antes ganaban y por ende, quizás tengan que ser más selectivos cuando las editoriales deciden imprimir una obra o bien, cuando se disponen a ponerla a la venta en formato electrónico.
Pero regresando al punto, no es esto lo que les molesta a los creadores de ACTA, PIPA o SOPA. no. Los derechos de autor es simplemente una cortina de humo.
Lo que les molesta es que de pronto en las redes sociales la gente tenga un medio de expresión libre, sin censura, el cual puede dar una nueva cara a los problemas que cotidianamente vivimos en las ciudades. Los gobiernos tienen como contrapeso los medios y si a esto le añadimos que ahora gracias a Internet podemos -casi siempre por la vía de las redes sociales- decir lo que pensamos, pues acallar a quienes no están de acuerdo con las tantas cosas que hacen los gobiernos parece entonces imposible. Por ello mismo Wikileaks ha tenido tantas dificultades con las leyes y por eso su fundador está en la mira de los gobiernos poderosos: hay que mostrar mano dura y el Reino Unido, en este caso, está decidido a deportar a Assange para que enfrente esos extraños casos de violación por los que se le acusa.
Así las cosas, a mí me queda clarísimo que estas iniciativas de evidente censura es por la desesperación de controlar lo que ya es incontrolable.
Hace tiempo hablé aquí, en este blog, de la censura en facebook. Pues bien, hoy hablaba con un exalumno de la Ibero por Facebook. Me contaba que estaba interesado en el software libre, en Java, en el código abierto, etc. Me preguntaba si conocía algunos libros de Java para poder empezar a trabajar sobre ese lenguaje. Le escribí entonces que entrara a www.4shared.com. Ahí podría encontrar un sinfín de libros digitalizados en PDF sobre el tema...
Pero para mi sorpresa, Facebook me puso la siguiente leyenda:
Este mensaje incluye contenido bloqueado que anteriormente se denunció como ofensivo o correo no deseado. Ponte en contacto con nosotros si crees que se trata de un error.
Volví a probar poniendo la dirección del sitio 4shared.com y de nuevo, facebook me regresó la misma leyenda. Me llama la atención. Probablemente los administradores de facebook recibieron la alerta de algún usuario sobre el sitio mencionado, que es un depósito de software en el que -desde luego- hay mucho software y archivos digitalizados ilegalmente. La idea será que los usuarios de facebook no caigan en conductas poco éticas. Sin embargo, lo que más me llama la atención es que esto era una comunicación privada entre dos usuarios.
Es evidente que Facebook no tiene a un administrador "mirón" para censurar mis comentarios. Es todo automático. Sin embargo, no deja de llamarme la atención este asunto.
Se me ocurrió hacer una prueba: poner un mensaje público mencionando el sitio ofensor. He aquí que facebook no se quejó, no puso ningún comentario adverso ni censuró el mensaje. De hecho, al poner la dirección www.4shared.com, facebook contestó con lo que se puede ver en la siguiente imagen:
Curiosamente, volví a repetir el anuncio, pero solamente poniendo 4shared.com (sin las www) y de nuevo, me dijo que era un mensaje con contenido ofensivo.
No entiendo muy bien las políticas de facebook. Me parecen curiosas, por decir lo menos.